domingo, 12 de junio de 2011


A cada paso encontraba su obra de arte, la obra de arte mas sorprendente que había visto en su vida, esa obra que tenia nombre, color, textura y espiritualidad.



A medida que avanzaba descubría mas, pues iba con los ojos abiertos; miraba con su alma y caminaba con su espíritu; a cada paso absorbia de cada verbo, cada elemento.